En una entrevista exclusiva para La Red, Ezequiel Piovi, capitán de Liga Deportiva Universitaria de Quito, dialogó  con nuestro compañero Domingo Valencia y rememoró la histórica final de la Copa Sudamericana en la que LDU se consagró campeón hace un año. Este logro representa mucho más que un título. Piovi habló sobre el camino al triunfo, la estructura del equipo y la motivación bajo la dirección de Luis Zubeldía.

Al recordar la victoria, Piovi destacó el esfuerzo colectivo que llevó al equipo a alzarse con la Copa Sudamericana: “Es un recordatorio de alegría y de felicidad. Logramos algo por lo que trabajamos mucho tiempo y pudimos darle una alegría a la gente que lo necesitaba. El camino no fue fácil, pero valió la pena”.

El capitán destacó la importancia de la solidez defensiva que el equipo desarrolló durante la campaña. “Como equipo, tuvimos una fortaleza en defensa que se agigantó en los últimos seis meses. A partir de la solidez defensiva y de mantener muchos partidos con el arco en cero, el equipo fue agarrando confianza. Con el equilibrio que generamos en el mediocampo, el equipo fue creciendo mucho desde ahí”, explicó.

Piovi también elogió el aporte de Paolo Guerrero. “Hablar de Paolo es hablar de calidad y jerarquía. Más allá del gol, su presencia atraía a los defensores, quienes estaban pendientes de él, liberando espacio para el resto de los compañeros”, expresó el capitán de Liga.

Sobre la experiencia ante Ñublense en la fase de grupos, Piovi lo definió como un momento clave: “Fue un partido raro, pero son cosas que pasan en el fútbol. No te puedes relajar ni un segundo en este tipo de competiciones. Creo que ese golpe vino en el momento justo”.

El capitán reconoció que los penales son difíciles de entrenar debido a la carga emocional. “Puedes practicar mil veces para patear a un lado, pero en una definición, hay muchas emociones en juego. Yo practico, aunque no es mi especialidad. Pero el más importante que pude patear fue adentro”, afirmó. Además, destacó la confianza en los ejecutores: “Ya lo habían demostrado contra Ñublense. Teníamos muy buenos pateadores de penales, y eso quedó demostrado en la copa, más aún teniendo al ‘Flaco’ (Alexander Domínguez) en el arco”.

Piovi también reconoció el papel de Luis Zubeldía en la motivación del equipo: “Luis siempre nos mantuvo motivados y alertas en todo momento, sabiendo lo que nos jugábamos. Nos decía que habíamos armado un plantel para ganar y que todos estábamos convencidos de que podíamos lograrlo. Al pasar en Brasil, en el Morumbí contra el gran candidato (São Paulo), nos dimos cuenta de que estábamos para ganar la Copa”.

Finalmente, Piovi habló sobre el orgullo de haber levantado el título como capitán de Liga: “Fue un paso muy importante en mi carrera llegar a LDU. Quería saber qué era jugar en un equipo grande, ver si estaba a la altura. Aspira a lograr cosas con el club. Me ha tocado pasar malos momentos, pero siempre trabajé y luché por ser campeón. Se nos terminó dando nada más y nada menos que en la Copa Sudamericana, un título internacional que no es para nada fácil y que la gente de Liga lo estaba esperando hace mucho tiempo”, concluyó Piovi, recordando el significado de la Sudamericana para el club y sus seguidores.