En un emocionante duelo de cuartos de final disputado en el Allegiant Stadium de Las Vegas, Uruguay y Brasil se enfrentaron en un partido tenso y táctico que culminó en empate 0-0 al término del tiempo reglamentario. La definición se trasladó a la tanda de penales, donde los charrúas se impusieron 4-2, asegurando su lugar en las semifinales y enfrentará a Colombia.

Desde el inicio, Uruguay presionó intensamente en la parte alta del campo, generando algunas ocasiones de peligro. Brasil, por su parte, controló la posesión y buscó espacios en la defensa uruguaya. Ambos equipos se mantuvieron firmes en la defensa, resultando en un primer tiempo cerrado con pocas oportunidades claras de gol.

En la segunda mitad, Uruguay continuó buscando abrir el marcador con ataques persistentes, pero sin éxito en la definición. La situación se complicó para los charrúas con la expulsión de Nahitan Nández a los 74 minutos, dejando al equipo con 10 jugadores. A pesar de la ventaja numérica, Brasil no logró capitalizar las oportunidades y el partido se mantuvo sin goles.

Con el empate persistiendo después de los 90 minutos, la suerte se decidió desde el punto penal. Uruguay mostró nervios de acero y convirtió cuatro de sus disparos, mientras que Brasil falló dos, con los intentos de Eder Militao y Douglas Luiz.

Manuel Ugarte fue el encargado de patear el último penal para Uruguay, sentenciando la clasificación de los charrúas a las semifinales.

Con este resultado, Uruguay selló su pase a las semifinales, donde enfrentará a Colombia el próximo martes 9 de julio.