El presidente del París Saint-German, Nasser Al-Khelaifi, fue acusado de corrupción por autoridades francesas.
Khelaifi, quien también es presidente del BeIN Media Group, fue acusado de haber intentado comparar los derechos para que Doha (capital de Catar) acoja al Mundial de Atletismo del 2017.
Se presume que Khelaifi dio un pago único de $3.5 millones al ex-presidente de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo, Lamine Diack. El evento fue eventualmente dado a Londres, cuando las votaciones reflejaron un voto mayoritario para la capital inglesa (Londres 16-10 Doha).
El abogado de Al-Khelaifi ha negado las acusaciones hacia su cliente y afirma que las autoridades no cuentan con fuentes fuertes para la incriminación.