Christian Pulisic empieza a convertirse en la promesa para la selección y fútbol de Estados Unidos. El joven jugador, de padres croatas, empieza a ganarse un puesto en el Borussia Dortmund en la presente temporada. Juega en la mitad de la cancha del equipo alemán y cubre el puesto que Osumane Demblé dejó en el pasado mercado de fichajes.

Pulisic aporta en el ataque del equipo, pero realiza un desgaste mayor en la defensa. Mide 173 centímetros y pesa 63 kilogramos. Muestra su juego para convertirse en el futuro de la selección de Estados Unidos. Pulisic comentó que ha “oído hablar de todas estas cosas sobre mí pero no me importan demasiado, solo intento sacarlo de mi cabeza. No necesito toda esta atención externa. Trato de hacer lo mejor para mí y para la gente que me rodea. Tengo muchas cosas por mejorar”, según recoge el Diario El País de España.

El ha estado en el Borussia Dortmund desde los 16 años. Además, con 17 años y 193 días se convirtió en el jugador más joven en vestir la camiseta de Estados Unidos en un partido con Eliminatorias, ahora tiene 19. Tiene en total 63 partidos con el Dortmund y lleva 14 asistencia de gol y 10 anotaciones. “Va a ser el mejor futbolista estadounidense que haya existido nunca”, se aventuró a predecir Thomas Rongen. De igual manera, el capitán de Estados Unidos, Michael Bradley dijo que “es fácil darse cuenta de que tiene unas habilidades especiales con la pelota. Esa manera de moverla, de resultar ligero con ella y sin embargo provocar siempre el error en el defensa”.

Pulisic quiere vivir su propio sueño y no sentir la presión de ser el futuro de Estados Unidos. En la página de su equipo, en su descripción, el joven jugador dice “No quiero ser el niño prodigio del fútbol americano. No quiero vivir el sueño de toda una nación, quiero vivir mi propio sueño”.

Fuente: elpais.com