Si algo hay que destacar de la Selección de Canadá que jugará la Copa del Mundo de Qatar 2022 es que es un equipo bien trabajado. Fiel al estilo de su entrenador, el británico John Herdman, quien gusta del análisis, del estudio del rival y de cuidar los mínimos detalles para ganar un partido de fútbol.
Canadá se instaló en el Grupo F junto a Bélgica, Marruecos y Croacia. A principio no es favorita para avanzar a la siguiente ronda, pero tampoco lo era para ganar la octagonal final de la Concacaf. Lo hizo con un fútbol dinámico, intenso, en el que sus jugadores fueron solidarios y en el que hubo variantes que sorprendieron al rival.
La virtud de Herdman ha sido saber direccionar el talento individual para crear una fortaleza grupal. En el campo los canadienses se entregan en cada balón, su arresto físico les permite competir, aunque durante la eliminatoria mostraron ser deficientes en el juego aéreo algo que, seguramente, estará corregido para Catar 2022. Los canadienses son fuertes en el uno contra uno. Apuestan a la transición rápida en defensa al ataque. Ceden el balón, dando la iniciativa al rival, pero en pocos pases pueden llevar peligro a la portería contraria, es un equipo muy intenso, que gusta de presionar arriba.